Nombre.

Un nombre:

María Dolores.

Sin juicio, y con sus permisos: mi nombre?, tambien la trampa.

En primavera engendrada, que  tanto sufriste madre para herrar así y a fuego, mi tierna y pura carne blanca?

 Fue ese otoño el testigo del final de alguna danza? 

Tanto sufriste mi luz que en plural y con mayúscula, tuviste que nombrar dolor a tu lucero? a tu alba?. 

 de Marías y Dolores que no desembocan su rabia..Porque yo la heroína de semejante camada?

Sin juicio, encontré mi trampa.

Madres de mi sangre santa: déjadme cantar bonito que me llamen luz o ámbar, 

permisos para  silbar gritos al cielo. 

Llevaos al cura  al guardia, y a las matronas con forceps que dejan sin voluntad a todas las evas santas, marcando a hierro las carnes de sus crías y sus almas por los restos de sus karmas.

Quitadme la culpa, el miedo, 

que canten desde mi voz todas las hijas del agua